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El escandinavo es una oca normal pero a lo loco, entre las pruebas a realizar a lo largo de la partida podemos encontrarnos con vaciar un vaso en un plato y luego bebérselo lamiendo como los perros, beberse dos tubos de agua en la parte final de la partida (cuando estamos llenos a reventar), beber un vaso mientras se dan vueltas corriendo en circulo y demás cosas por el estilo. Tenéis que tener claro que en este juego vais a hacer el ridículo, y mucho. Si preferís los juegos de beber sin tener que hacer el primo este juego no es para vosotros, en cambio si os encanta ver a otros haciendo el estúpido y no os importa hacerlo a vosotros el escandinavo es vuestro juego.
Las reglas son exactamente iguales a cualquier otra oca: tiro el dado me muevo el número de casillas que he sacado y hago lo que mande la casilla donde he caído, no vamos a darle más vueltas a lo evidente.
Una cosa importante es que para jugar al escandinavo necesitaremos algunos materiales poco habituales (tipo un plato), el listado de estos materiales se encuentra en la hoja de reglas del juego, no es imprescindible coger estas cosas y ponerlas en la mesa al arrancar el juego pero sí que tenemos que ser conscientes de que si no tenemos alguna de estas cosas en casa (o en el bar, o donde quiera que juguéis) no podremos jugar como dios manda.
Poco más hay que decir respecto a este juego, aquí tenéis tanto el tablero como las reglas del juego listos para imprimir y disfrutar:
Bueno, esto es todo por hoy. Ha sido corto el post de hoy pero tampoco hay mucho más que decir. La semana que viene otro juego, ya sabéis. ¡Hasta la próxima!.
No va el enlace
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